Hola a todos! acabo de darme cuenta de cuánto tiempo hace que no escribo nada en el blog, al ver la fecha de la última entrada incluso he pensado que hacía mucho más tiempo.
No lo he dejado de lado, siempre está presente como contacto entre mis ideas y acciones con vosotros.
Han surgido idas y venidas en estos meses. Momentos de espera y momentos de estrés, el actual. Me estoy adaptando al nuevo horario, con yoga todas las mañanas y mi vuelta a la danza.
El grupo de tarde de yoga se está resistiendo. No tengáis miedo a venir solos a la clase, no pasa nada, una clase particular es un regalazo, aprovechadlo. Cuando uno comienza, al poco se le van uniendo más personas.
Esta semana ha aparecido de nuevo en mi mente la idea de ver paso a paso los Yoga Sutras de Patanjali y es muy probable que además de hacer un repaso por ellos comencemos a cantar la oración a este sabio al inicio de la clase (en las clases de Macías Belmonte).
Se me olvidaba comentar mi contento por las clases de Ciudad Deportiva. Llevo allí desde febrero del año pasado y empecé con una sola persona. Poco a poco fueron viniendo algunas personas que se sumaron y otras solo pasaron sin quedarse, llegando a ser en junio un grupo de máximo 6 personas.
Este año, sin embargo, mi primer día (un viernes) vinieron 5 alumnos, esperaba menos, la verdad. Y a la semana siguiente llegó la gran sorpresa: lunes 16 personas, miércoles 19 personas, viernes... Sigue esta racha y yo estoy encantada,¡¡¡a la gente le gusta el yoga!!!
Prometo una nueva entrada muy pronto.
Un abrazo
Namaste
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